Para mirarte
primero he de sacarme los ojos.
Sacarme las ganas
estar dispuesto a olvidar..
Si te flecho con los ojos
con los ojos del poeta,
tu poema es interminable.
Tu poesía es Infinita.
Si te doy con los ojos de este mundo,
se cruzan los cables
y estalla de incomprensión mi cabeza.
Para mirarte
primero,
he de soltar
la nada que me sujeta,
y sumergido en el olvido conciente
veo Nacer en ti,
su semblante divino..
Su manto teñido de sombra,
la Alegría redentora de Aquel que no tiene nombre
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario