miércoles, 27 de julio de 2016

Prima

Lengua que trasciende los montes,
ha dado conmigo tu palabra.
Para protegerme
te escudas,
espina de cacto,
colmillo de caimán.
Para aliviarme
te ablandas,
de suaves praderas,
de campo o de pluma volar..

Sales al jardín, al mundo y a la guerra.

¿Qué seria yo sin Ti?

Lo básico,
lo Prima.

Cuando me achico como gusano
como queriéndome esconder de mí mismo,
y me retuerzo y contracturo,
Tu sales a salvarme,
como una mano protectora y antigua,
descargas en mi tu furioso latido.

Madre loba,

Vientre bajo del poeta.

-¿Qué seria yo, sin ti?-

Me arrastro por el verde de tu cuerpo,
uso tus manos, tu sudor
y riego tu yo entero de mi olor,
de mi particularidad.
Me rearmo de ti.
Te vivo con la piel y los órganos abiertos,
con los ojos,
¡Me alzo de ti!
Me baño de tu manto, de tu pecho extenso.
Me cubro contigo

del mundo
y su tempestad..

¡Que no es como la tuya!

Que si sabes hacerte sonar.


Descanso en tu anatomía de luz y sombra.

Muero y renazco de ti.

No hay comentarios:

Publicar un comentario