El hombre
carga en el vientre
invierno y primavera.
Heladas ausentes
le atraviesan la piel
congelando
las flores del jardín.
Baños de luz
que
entibian
la tierra de mis pies,
le calientan el alma.
El hombre
fertilizando la vida,
repartiendo abrazos
de puerta en puerta como el sol.
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